La pugna por los votos crece. (Foto: BBC)
Son alrededor de 137 millones de votantes que elegirán al próximo jefe de Estado y Gobierno.
El suspenso invade Estados Unidos y no es por la pandemia, porque en ese país ya se registraron más de 231 mil fallecidos. Este martes 3 noviembre, el país norteamericano enfrenta una de las elecciones más importantes de su historia. Los ciudadanos deberán elegir entre el republicano y actual presidente, Donald Trump o el demócrata Joe Biden.
Millones de estadounidenses acudieron desde temprano a las urnas para sumarse a los más de 100 millones que votaron de forma anticipada. Se estima que es la mayor participación en la historia reciente del país.
Aún no existe un triunfalista, en sus manos está otorgarle cuatro años más al mandatario republicano o reemplazarlo por su rival demócrata.
Por la tarde, en una reunión con su comité de campaña, el jefe de Estado dijo que no estaba pensando en un discurso de derrota porque para él no es fácil perder.
"Con suerte hacemos uno de esos dos discursos y, ya saben, ganar es fácil. Perder nunca lo es, para mí no", expresó Trump, que seguirá el recuento de votos con sus asesores y familia.
Por la mañana del martes, Biden visitó la tumba de su hijo en el cementerio parroquial de la iglesia de Saint Joseph. En el campo santo, también están enterrados su difunta esposa, Neilia, y su hija pequeña, Naomi, quienes perdieron la vida en un accidente automovilístico en 1972.
De acuerdo con un medio internacional, los resultados en Indiana y Kentucky son favorables para el presidente Trump. Debido al elevado número de votos por correo, y las diferencias en las reglas para el conteo que existen entre los Estados, es bastante probable que algunas regiones tarden unos días en ofrecer resultados oficiales.
Tanto el presidente Trump como Biden, votaron por anticipado. El mandatario lo hizo en Florida el 24 de octubre, mientras que su opositor hizo lo mismo el 28 de octubre en Delaware, lugar donde reside actualmente.
miércoles, 04 de octubre del 2020